Estados Unidos regresa al acuerdo contra el cambio climático
El segundo emisor mundial fija sus metas
Philadelphia / 19 de febrero de 2021
El Acuerdo de París sobre el Clima, firmado por 196 países en 2016, reúne a la comunidad internacional en torno al objetivo colectivo de mantener el calentamiento global por debajo de los 2 °C en comparación con los niveles preindustriales, con una meta de no más de 1,5 °C. En su primer día en el cargo, el Presidente Biden firmó una orden ejecutiva para que Estados Unidos volviera a formar parte de esta comunidad climática internacional, y el periodo de reincorporación de 30 días ya se ha cumplido.
Las sequías se prolongarán durante 4 meses más y expondrán a 388 millones de personas más a la escasez de agua.
Está claro que lo que está en juego es de vital importancia, y 2°C no es suficiente. Reducir el calentamiento global en tan sólo medio grado es la diferencia entre un mundo con arrecifes de coral (aunque todavía en peligro) y otro en el que ya no existen. También supone una reducción de más del 20% de la población mundial expuesta a olas de calor severas, así como a fenómenos de lluvia extrema, y más de 100 millones de personas estarían protegidas de la escasez de agua.
Nuestro planeta ya ha visto los efectos de la subida de un grado de calentamiento con respecto a los niveles preindustriales, y el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático estima que las emisiones mundiales deben reducirse en un 49% con respecto a los niveles de 2017 para el año 2030, y alcanzar las cero emisiones netas de carbono para el año 2050, para mantener el calentamiento en 1,5°C. Sin embargo, este ambicioso objetivo no está fuera de nuestro alcance, y Estados Unidos, como segundo mayor emisor de gases de efecto invernadero del mundo, debe desempeñar un papel clave en la prevención de la catástrofe climática a nivel mundial.
No nos asustan los avances que cambian las reglas del juego ni los grandes retos porque nos gusta que nos empujen.
Nuestros días nunca son iguales y tampoco lo es nuestra visión de "lo que es posible" de un año a otro. Nos enfrentamos a los mayores retos del mundo en materia de energía verde porque para nosotros no hay otro camino. Es lo que sigue.
A medida que las economías salen de un año devastado por la pandemia mundial, y la urgencia de una acción climática audaz se hace más evidente cada día, la acción decisiva del Presidente Biden sobre el cambio climático se erige como un referente para el crecimiento sostenible. Debemos salir “más verdes” de esta crisis y con sólidas perspectivas hacia futuro: la energía eólica es una de las palancas clave para lograrlo y para que la economía mundial vuelva a estar en marcha.